-EL SÍNDROME DEL ATLAS-.

 

Sientes a menudo el peso de la responsabilidad, te pesa el trabajo, la vida, la familia y los propios pensamientos, pero aún así quieres que todo esté bajo tu control. Este estado mental se denomina el síndrome del atlas, una realidad que aparece con más frecuencia de la que pensamos. Son muchas las personas que que caminan por el mundo con la obligación moral de poder con todo. Son conscientes de que están al límite de sus fuerzas y que sería adecuado delegar tareas en otras personas y descansar. 

Este tipo de actuaciones suelen darse en quien de pequeños tuvieron que asumir tareas que no eran acordes a su edad. Las personas con este tipo de síndrome se sienten agotadas de tener que responsabilizarse de todo, pero es así como entienden su vida, y refuerzan su autoestima.

Puede aparecer básicamente, en personas que no tuvieron una infancia normal. Fueron niños/as que por diversas razones, se vieron obligados a desempeñar el papel de adultos al tener que cuidar a hermanos mayores, padres o abuelos.

Estas vivencias tempranas generaron en ellos/as una elevada ansiedad, se veían superados por las obligaciones y lo que minó su autoestima y autoconcepto.

Asumen responsabilidades para reforzar la imagen personal. Son personalidades que descuidan sus necesidades para priorizar las de otras personas. Tampoco conectan con sus realidades psicológicas y emocionales, las dejan a un lado porque lo único que importa es trabajar y llegar a todos/as menos a sí mismos/as.

Son poco asertivos, son incapaces de poner límites y de decir "No" cuando se les pide algo, y presentan una sensibilidad y preocupación excesiva por el bienestar físico y emocional de los demás. 

El síndrome del atlas correlaciona con trastornos del estado de ánimo como la depresión. También suelen aparecer trastornos de pánico y la ansiedad que provoca dolores de estómago, cefaleas, vómitos...

Esta realidad es más común en el género masculino, la idea de que "deben poder con todo", es una motivación adicional para asumir situaciones de elevado desgaste mental. El índice de suicidios entre los hombres es más alto que en las mujeres.

Ese mito de que debemos poder con todo, es algo que hemos asumido sin pensar en sus consecuencias. Esto no es saludable, ni lógico, ni aceptable. 

Tras el síndrome del atlas hay depresiones descuidadas y condiciones mentales no atendidas. No lo dejemos correr en el tiempo. Nadie puede ni debe responsabilizarse de los demás si primero no lo hacemos con nosotros mismos y debemos sobre todo aprender a delegar tareas en los demás y no tener miedo por ello, no es necesario ser tan perfeccionista, ni pensar que nadie lo va a hacer como yo. Aprendemos a delegar y confiar en nuestro entorno.