¿ CÓMO RECONOCER A UN VAMPIRO EMOCIONAL?-
Alguna vez has hablado con alguien y luego sientes una sensación de agotamiento?, un cambio repentino de humor. Si lo sentiste es posible, que te encuentres ante un vampiro emocional. Esta clase de sujetos te deja sin energías y te hacen sentir cada vez peor.
Los vampiros emocionales no se distinguen a simple vista, son individuos que nos podemos encontrar en cualquier sitio: oficina, gimnasio, familia...
Algunos de los rasgos que lo identifican pueden ser los siguientes:
- Te hacen sentir abrumado, exhausto, abrumado o deprimido.
- Tendencias narcisistas y necesidades de admiración y atención.
- Suelen culpar a otros con el objetivo se sentirse superiores.
- Muestran cambios de humor rápidos y desconcertantes.
- No son capaces de enfrentar los desafíos de la vida de una manera constructiva, pero intentan pasar a los ojos de los demás como víctimas.
El superior:
No podemos identificar a un vampiro emocional a simple vista, pero poco a poco después de ganar tu confianza y simpatía, empezará a manipularte y a ejercer violencia psicológica sobre ti.
Esto hará que tu energía vaya en detrimento y el vampiro emocional se siente superior a todos y disfruta haciendo que te sientas inferior.
El Catastrófico:
Esta clase de vampiro emocional utiliza una actitud de negatividad, haciéndoles creer a los demás que está rodeado de desgracias. Su objetivo es atraer la atención y energía de los demás para llenar sus propias faltas.
El Envidioso:
Los vampiros emocionales, hombres y mujeres, se llaman así porque tienden a drenar o chupar las energías de los demás. Y menosprecia a los demás.
El Chismoso:
Son los que no respetan la intimidad de los demás y se inmiscuyen en las vidas de los demás. Así es como captan la atención de los demás con chismes que no son verdad con el objetivo de difamar la imagen social de una persona y además difunde falsos rumores.
El Irascible:
En este caso, el sujeto tiene un comportamiento iracundo, el cual intenta contagiar a otras personas de su entorno, creando un ambiente de ira e insatisfacción. Para reconocerlo hay que poner el énfasis en su estado de humor general, les encanta desahogarse con los demás.
El Controlador:
No confía en nadie. Por eso intentan controlar a todos obsesivamente y decirles como deben ser y que deben pensar y decir. Actúan invalidando las emociones de los demás cuando no encajan con la forma de ver la vida de ellos. Te hacen sentir dominado, devaluado e inferior.
El Aprovechado:
Estas personas suelen actuar de una forma condescendiente. Su mejor arma es la pasividad porque actúan apropiándose de ideas y méritos de otras personas.
El Moralista:
Este tipo de individuos se sirve del chantaje y del juicio moral. Así es como crean un grupo de adeptos que puedan ofrecerle atención.
El Hablador:
Este sujeto capta durante mucho tiempo la atención de las personas, y desahoga su frustración con los demás, robándoles su tiempo. Además carece totalmente de empatía y sólo se interesan por sí mismas.
El Hipocondriaco:
Hay que poner atención en su actitud de víctima. Quieren generar preocupación a las personas de su entorno para asegurarse su atención. De esta forma se aprovecha de las personas con empatía y compasión.
La Víctima:
Comparten la actitud de víctima y harán creer a los demás que son infelices con una serie de argumentos fruto de su imaginación. Por eso, si se le ofrece una solución querrán cambiar e tema. Te sentirás abrumado/a y con impotencia ante ellos.
El Narcisista:
Su lema es. "primero Yo". Intentan acaparar la atención y buscan sentirse admirados/as. Son peligrosos porque carecen totalmente de empatía. Se pueden volver punitivos, fríos e indiferentes.
El Rey o Reina de los dramas:
Estas personas son maestras en convertir algo sin importancia en trascendente con el objetivo de llamar la atención. Sus argumentos son catastróficos. Con ello intentan acaparar tu tiempo para contarte sus devastadoras historias, lo que te provocará agotamiento emocional.
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