REDES SOCIALES Y DISTORSIÓN DE LA REALIDAD.





Desde hace unos años las redes sociales se han introducido en nuestras vidas hasta tal punto en que a día de hoy son indispensables para un gran número de personas, y como no podía ser de otra forma, por desgracia, ya se comporta como una nueva adicción.

Y es que las redes sociales tienen mecanismos que nos permiten recibir respuestas rápidas, recompensas inmediatas e interactividad con un gran número de personas. Cada vez tenemos menos tiempo para aburrirnos. Pero mal gestionadas también pueden ser motivo de alejamiento de la realidad, inducir ansiedad, afectar a la autoestima o hacernos perder la capacidad de autocontrol.

En las redes sociales debemos mostrarnos tal como somos, pero sin enseñar toda nuestra vida por las redes. No se puede ni se debe sacar conclusiones por ver cuatro historias, leer algunos posts o darles  me gusta a algunas fotos, te puedes hacer una idea de su tipo de vida pero siempre estará supeditado a lo que quiera mostrar.

Cuando nos va bien solemos compartir más cosas en las redes sociales, pero también debemos compartir lo duro que resultaba el proceso, el sacrificio que se tiene que hacer, y ponerlo en un contexto apropiado. No hay que vender la receta del éxito, ni banalizar el proceso.

Las mismas personas que ese día se hartaban de subir fotos y vídeos a sus redes sociales con mensajes positivos y vendiendo una felicidad que no era cierta. Las mismas que un tiempo después dejaban de subir contenido porque se habían quemado del malvado mundo del fitness, la competición o de las redes sociales. Hay muchos mensajes falsos en ellas.

Muchas veces las redes sociales te venden que un objetivo en concreto está al alcance de todo el mundo y no es cierto. La frustración está a la vuelta de la esquina si te comparas con todo el mundo sin entender el proceso por el que esa persona ha pasado, sin entrar a valorar aspectos como su genética o el uso y abuso de sustancias, como sucede muchas veces.

Deja de compararte con los demás. Tampoco podemos olvidarnos de que no todo lo que vemos es 100% real, el mundo del photoshop y los retoques estéticos están a la orden del día.

Vemos personas que parecen rozar la perfección cuando o bien llevan encima bastantes retoques estéticos ( que es licito) o tienen formas, o estructuras corporales o pieles perfectas cuando en realidad no es así.

A quién debemos seguir en redes sociales. No somos nadie para recomendar a quien debemos seguir o no, eso debe valorarlo cada persona, pero si vemos que algo o alguien nos hace sentir mal, inferiores o fracasados quizá si es el momento de valorar si su ejemplo nos beneficia o nos hace sentir peor. 

Si nos motiva y nos ayuda a ser mejores, o al menos intentarlo, adelante, pero si nos baja la autoestima...deberíamos revisadlo. Debemos procurar que las personas a las que sigamos y lo que vemos en ellas nos aporten algo de valor.

Nuestra lista de a quien seguimos debería estar formada formada por aquellas personas que nos transmiten positividad, que nos motivan, que nos enseña cosas o simplemente nos entretiene, hay todo un universo de personas que trabaja mucho su perfil, gente que aporta conocimiento y que divulga de forma gratuita.

Y por el contrario, a quién No debemos seguir en redes sociales. 

Todos/as en algún momento hemos dejado de seguir a mucha gente, algunos /as de ellas porque sentíamos que sólo nos transmitía negatividad, gente que sólo buscaba conflicto, que criticaba o menospreciaba el trabajo del resto.

Hemos dejado de seguir a gente que vendía una imagen de triunfador o irreal que en determinados momentos nos hacían sentir mal con nosotros mismos, incluso a aquellos/as que sólo suben sus cuerpos perfectos y a nosotros/as no nos aportaban nada.

El tiempo que pasamos en redes sociales también es muy importante.  Debemos cambiar la perspectiva y procurar ser algo más consecuentes en donde invertimos nuestro tiempo de calidad.

Asimismo debemos gestionar de forma correctas nuestros contactos, hay que ser cuidadosos/as con quien dejamos entrar a nuestro mundo virtual.

Debemos intentar huir de las formulas milagro, es decir, cambios físicos excepcionales en poco tiempo, historias de éxito sorprendentes de la noche a la mañana, gente que te vende una idea, un concepto o experiencia que no ha tenido, o que no se ha tenido que currar.

En las redes sociales debemos aceptar críticas constructivas, aunque en un principio no nos gusten, siempre y cuando estas no se conviertan en insultos o faltas de respeto.

En un principio, cuando recibimos comentarios negativos nos pueden afectar, pero cuando pasa un tiempo y vamos conociendo un poco más estas redes entendemos que sólo podemos ser responsables de nuestros actos y nuestras palabras y que siempre habrá gente con ganas de molestar dispuesta a sacar toda esa frustración y que tiene en su día a día y pagarla con el primero que pase por allí.

Si recibimos muchas críticas o mensajes desagradables, es conveniente observar primero si tienen fundamento alguno, y sino lo tienen, lo mejor es ignorarlos.

Ya sabemos aquello de "No hay mayor desprecio que no hacer aprecio".

Y si por el contrario somos de los que nos dedicamos a insultar y a burlarnos de los demás hay que hacérselo mirar, seguramente haya un motivo por el cual lo que observas y ves nos puede molestar, sea lo que seas es nuestro problema, y no debemos pagarlo con los demás, ya que si persiste uno/a en esa actitud, lo mejor sería que eliminemos la cuenta.

En las redes sociales se siempre tú mismo...

Comentarios

Entradas populares de este blog

-RELACIONES DESTRUCTIVAS: SÍNTOMAS Y CONSEJOS PARA SALIR DE ELLAS.

-QUÉ PIENSA UNA PERSONA CUANDO DEJAS DE BUSCARLA-.

POR QUÉ MENTIMOS SEGÚN LA PSICOLOGÍA.