YO HABLO SOL@
Cuántas veces nos hemos preguntado si hablar solo/a es normal, y seguro que más de una persona te ha sorprendido hablando solo/a.. Pero nos preguntamos si esto es bueno o no.
Yo por ejemplo lo hago a menudo.
Hablar solo/a no tiene nada de malo, al contrario, nos ayuda a organizar nuestras ideas, a seguir los pasos para resolver una tarea y a memorizar en algunos casos.
Si te has sorprendido hablando contigo mismo/a en alguna ocasión, recordando lo que tienes que hacer o lo que no puede faltar en tu bolso, no tenemos de qué preocuparnos, incluso si es otra persona la que nos ha sorprendido, no pasa nada, no va a pensar que estás loca ni que tienes un problema. Hablar solo/a ni es malo ni es nada raro.
Sin embargo, hay algunas ocasiones en las que hablar solo/a puede ser un síntoma de un trastorno mental. En estos casos, hay que buscar otros síntomas que confirmen las sospechas.
En las psicosis, la persona no habla sola con ella misma, sino que responde a alucinaciones visuales o auditivas. Estas conversaciones se reconocen fácilmente porque carecen de lógica y son normalmente ajenas a la realidad. Estas alucinaciones pueden darse cuando la persona padece esquizofrenia, trastorno bipolar o como consecuencia del consumo de toxicomanías...
Y en cualquiera de estos casos, se necesita evaluación y un tratamiento apropiado en cada caso en particular.
Hablar solo/a en voz alta no sólo no es malo sino que conlleva una serie de beneficios:
- Nos ayuda a motivarnos. Si nos vemos diciendo expresiones como "ánimo", "tu puedes", "lo estás consiguiendo"... conseguiremos la motivación que necesitamos para seguir con la tarea a realizar.
- Ayuda a memorizar. Leer o estudiar en voz alta favorece la memorización.
- Disminuye la ansiedad y el estrés.
- Permite una mejor interpretación de los problemas o acontecimientos. En muchas ocasiones al decir las cosas en voz alta se ven de una manera más clara.
- Facilita seguir pasos para resolver una tarea complicada.
- Favorece la toma de decisiones.
- Nos permite reforzarnos positivamente durante la realización de una tarea. Este punto es muy recomendable en tareas difíciles o pesadas.
- Nos ayuda a reflexionar con perspectiva.
- Nuestro pensamiento es un diálogo con nosotros mismos/as. No decimos en voz alta todo lo que pensamos, pero sí que hay ocasiones en las que ese diálogo lo tenemos en voz alta. Puede ocurrir incluso si hay otras personas cerca.
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