-SÍNDROME DE CAPGRAS-.

Este síndrome también conocido como ilusión de los dobles, es un trastorno delirante consistente en la creencia de que una persona, generalmente cercana y significativa para la persona, ha sido sustituida por un doble a quien considera un impostor. Su causa es desconocida, aunque es habitual encontrar este delirio en la esquizofrenia paranoide, en depresiones psicóticas, trastornos delirantes o trastorno bipolar. Otro número de pacientes afectados por esta enfermedad tiene su origen en las enfermedades orgánicas que cursan con clínica de delirio, aparece en varios tipos de demencias ( alzhéimer, cuerpos de Lewis, Parkinson). También cursan otros factores como ictus, epilepsia, cuadro de alcoholismo crónico y encefalitis. 

Es un trastorno delirante de identificación errónea, las personas que padecen este síndrome no reconocen los rostros de las personas, muchas veces ni siquiera el suyo propio. En ocasiones, la idea delirante de sustitución no recae sobre las personas sino sobre animales domésticos incluso objetos. Fue descrito por primera vez por Capgras en 1923.

El reconocimiento facial radica en áreas cerebrales localizadas en la zona temporal, occipital, y parte del sistema límbico. Se cree que puede haber una falta de conexión entre el reconocimiento facial y las emociones que un rostro conocido provocan. Emociones que se creen controladas por la amígdala, una región localizada en el interior de la región temporal del cerebro.

Pese a tener un componente psiquiátrico, se ha detectado que en muchos casos existe una afectación cerebral que puede explicar los síntomas en pacientes que han padecido lesiones cerebrales o se ven afectados por algún tipo de demencia. En ocasiones, se ha visto también este síndrome en personas con diabetes mellitus, migrañas crónicas o que han consumido alguna sustancia ilegal.

Algunos de los síntomas más importantes son los siguientes:

• Reconocer el rostro de una persona pero detectar algo extraño que no les cuadra en la persona.
• Sensación de angustia al sentir que la persona que conocían perfectamente parece haber sustituido por otra.
• Ideación paranoica por saber qué está ocurriendo. 
• En algunas ocasiones paramnesia duplicativa, que es otro trastorno delirante que consiste en creer que un lugar habitual de la vida de la persona ha sido duplicado y que existen dos versiones del mismo lugar

El diagnóstico se basará en la explicación de la ideación delirante que haga la persona que tiene este tipo de síndrome. Es preciso descartar el consumo de tóxicos como la ketamina. También es necesaria una exploración neurológica y un estudio de imagen a nivel cerebral y también estaría como opción realizar un electroencefalograma.

El neurólogo es el especialista más conveniente para el diagnóstico del síndrome, pruebas neurológicas, un test de fluidez verbal, fonológico y semántico, test para comprobar el estado de memoria, test de reconocimiento facial... serían las pruebas más acordes para su diagnóstico.

En caso de presentar una lesión subyacente debe ser tratada como un hematoma cerebral o una neoplasia. En casos de demencia o de trastorno esquizofrénico se tratará con el uso de fármacos antipsicóticos. La terapia cognitiva a medio-largo plazo puede ser igualmente eficaz, para hacer más llevadero este síndrome

No existen medidas específicas para prevenir este síndrome. Es necesario ponerse en manos de un especialista.

Como conclusión podemos decir que este síndrome sigue siendo una incógnita y todo un misterio para los investigadores en neurociencias ya que es un síndrome muy poco común, por ello es importante aumentar los conocimientos sobre el mismo, para ayudar a su diagnóstico y ofrecer unos cuidados mejores a estas personas.